El club de intercambio de lengua latina es un lugar donde los estudiantes bilingües pueden compartir su conocimiento para obtener una mejor comprensión de otras lenguas. Este club trabaja con estudiantes del programa de Desarrollo de Idioma Inglés (ELD) y les ayuda a aprender inglés. Juntos, los miembros del club están creando una comunidad creativa e inclusiva.
Emma Quaroni es una estudiante de tercer año. El año pasado, ella y su amiga Claire Mussche empezaron el club de intercambio de lengua latina y se volvieron los co-presidentes de este club.

“Yo hablo italiano porque ambos de mis padres son inmigrantes, y Claire habla francés,” dijo Quaroni. “Siempre nos hemos interesado conocer personas nuevas que hablan un idioma diferente. [Señora Do Carmo] se acercó a nosotras y pensó que sería una buena idea incluir a los estudiantes de ELD.”
El club les ayuda a estos estudiantes para entender mejor el inglés, y en cambio, los estudiantes de ELD ayudan a sus compañeros cómo pueden aprender idiomas que ellos no habían aprendido. Durante las reuniones, los presidentes hacen presentaciones, ambos en español y en inglés para asegurar que todos los miembros puedan entender lo que dicen.
El otro co-presidente del club es Mussche, también en tercer año de la escuela. Ella es una hablante de francés nativa, y ahora, a causa del club, está aprendiendo español.
“Algunos objetivos principales [del club] probablemente sean inspirar a las personas a no solo aprender un idioma pensando ‘Tengo que memorizar esta conjugación,’ y en cambio, observar patrones y usarlo a aprender más idiomas y culturas diferentes,” dijo Mussche.

Lauren Dickerman es de tercer año, y ella es la secretaria del club de intercambio de lengua latina. Se unió al club el año pasado.
“Me encanta aprender idiomas, y pienso que es muy interesante como los idiomas y sus raíces pueden ser similares. Creo que es muy genial poder conectar con otras personas y aprender sobre culturas diferentes,” dijo Dickerman.
Desde el comienzo del club, los miembros han creado un espacio divertido y seguro. Es una comunidad que acoge a todos, y tiene un impacto positivo en las mentes de estos estudiantes.
“[Aprender otro idioma] ayuda con el desarrollo cerebral, como aprender a traducir y ese tipo de cosas,” dijo Quaroni. “Si viajas, puedes conectar mejor con la gente allí. Obviamente, las personas se sentirán como en casa cuando hablas su idioma.”
Si te interesa mejorar tus habilidades lingüísticas, ¡pásate por el club de intercambio de lengua latina! Ellos se reúnen cada dos martes en el salón 133 con la Señora Do Carmo.